Relación entre criminología y políticas públicas:
La Criminología, como ciencia,
estudia las causas del delito, a los delincuentes, a las víctimas y las
respuestas sociales orientadas a la prevención del crimen. En este sentido,
abarca aspectos preventivos sustentados en diversas teorías criminológicas, las
cuales resultan fundamentales para comprender el fenómeno criminal.
Teorías como la prevención situacional del delito, la teoría del control social
y la teoría de las actividades rutinarias, aportan enfoques valiosos en el
ámbito preventivo, ya que permiten analizar los factores que inciden en la
comisión del delito y orientar estrategias eficaces para su reducción.
Por su parte, la formulación de
políticas públicas debe fundamentarse en el conocimiento profundo de la
realidad social. En este sentido, las políticas públicas son estrategias que el
Estado, a través de sus instituciones, pone en práctica con el objetivo de
prevenir el crimen.
Estas estrategias no deben basarse en suposiciones o ideas carentes de sustento
teórico, sino en conocimientos científicos y evidencias concretas. Desde esta
perspectiva, la Criminología cumple un papel fundamental en la elaboración de
políticas públicas, ya que proporciona herramientas teóricas y analíticas que
permiten comprender el fenómeno delictivo. Gracias a este aporte, es posible
diseñar e implementar estrategias preventivas eficaces, en sus diferentes
niveles: primario, secundario y terciario.
imagen: objetos de estudio de la criminología
La criminología como
herramienta analítica y predictiva para el diseño de políticas
La
criminología analítica es una rama de la Criminología que estudia el delito de
manera detallada y profunda, utilizando herramientas de análisis técnico y
métodos científicos. Se apoya en datos estadísticos, estudios de campo, teorías
criminológicas y otras disciplinas como la sociología, la psicología y el
derecho, con el fin de comprender el fenómeno delictivo.
Su fin es determinar
si las otras criminologías y política criminal cumplen con su cometido,
Esto implica que la criminología
analítica tiene la función de evaluar si las políticas criminales están siendo con
correctamente aplicadas y si en realidad resultan efectivas en la prevención y
reducción del delito.
Dicha evaluación se realiza a través del análisis de datos concretos, como
estadísticas delictivas, tasas de reincidencia, percepción de seguridad
ciudadana y resultados de programas de prevención.
Ejemplo
Dentro de una comunidad se han
identificado patrones de comportamiento inadecuados entre la población joven
del lugar. Ante esta situación, y tras múltiples quejas por parte de los
vecinos, las autoridades decidieron ejecutar un plan para mitigar dicha problemática.
Como parte de la estrategia, se aumentó el patrullaje en la zona.
Durante los primeros tres meses, se registró una disminución en los delitos, lo
cual indica un resultado positivo inicial. En este contexto, la criminología
analítica puede desempeñar un papel fundamental al evaluar si la política
criminal aplicada ha sido efectiva o no.
Desde este enfoque la Criminología
analítica es fundamental para el diseño de políticas públicas, a través de métodos
cualitativos y cuantitativos se pueden ejecutar políticas criminales,
integrales.
De la criminología académica a
la aplicada:
De manera general, como
estudiantes de Criminología, a lo largo de nuestra formación hemos estudiado
fenómenos delictivos, sus causas y las diferentes teorías criminológicas que
permiten comprender el fenómeno criminal en su totalidad.
En este sentido, la criminología académica proporciona el conocimiento teórico
y metodológico necesario para analizar y entender estos fenómenos de forma
profunda y fundamentada.
Criminología aplicada
A partir de este conocimiento
profundo proporcionado por la criminología académica, se da paso a la
criminología aplicada, la cual se traduce en la puesta en práctica de ese saber
teórico.
Esta rama está conformada por jueces, funcionarios públicos, profesionales en
criminología, entre otros actores del sistema penal, quienes integran sus
conocimientos para abordar de manera directa el fenómeno criminal.
En concordancia con el autor citado previamente, la criminología aplicada se
manifiesta en diferentes ámbitos, tales como la formulación de nuevas leyes, la
implementación de políticas criminales y el tratamiento penitenciario.
Ejemplos
La Criminología estudia las
causas del crimen, lo cual permite identificar los diversos factores que
potencian las conductas delictivas, entre ellos los factores sociales,
ambientales, económicos y culturales, entre otros. A partir de este
conocimiento, se elaboran diferentes políticas criminales orientadas a la
prevención y reducción del delito.
Entre estas políticas destacan los programas de inclusión social dirigidos a
jóvenes en situación de riesgo, quienes son considerados una población
vulnerable. Actualmente, se observa que una gran cantidad de jóvenes forman
parte de bandas criminales o están involucrados en el consumo de drogas.
Por ello, resulta fundamental
abordar la criminalidad desde la prevención primaria, es decir, anticiparse al
delito antes de que ocurra. Este enfoque preventivo permite intervenir sobre
los factores de riesgo que propician conductas delictivas, especialmente en
poblaciones vulnerables.
Dentro de estos programas preventivos, también es esencial promover la
empleabilidad, ya que el acceso al trabajo digno contribuye significativamente
a mitigar el crimen.
Otro ejemplo del conocimiento
criminológico aplicado es el tratamiento penitenciario y la reinserción social.
En este contexto, se pone en práctica la prevención terciaria, la cual
interviene una vez que el delito ya ha ocurrido y la persona ha sido privada de
libertad.
Las cárceles, además de cumplir una función sancionadora, deben asumir el
compromiso de reintegrar al individuo a la sociedad. Para ello, es fundamental
que las personas privadas de libertad accedan a programas de tratamiento, tales
como educación formal, formación para la empleabilidad y rehabilitación en el
consumo de drogas. Estas acciones buscan prevenir la reincidencia delictiva y
promover una segunda oportunidad para quienes ya han delinquido.
Rol del criminólogo
Finalmente, al abordar el papel
de la Criminología como base del conocimiento para la formulación de políticas
criminales, se reconoce la importancia del rol del criminólogo. Gracias al
conocimiento adquirido, este profesional está capacitado para analizar el
fenómeno criminal en profundidad, identificando sus causas desde diversas
dimensiones: sociales, psicológicas, económicas, culturales, entre otras, como
se ha desarrollado en los apartados anteriores.
Asimismo, el criminólogo tiene la capacidad de diseñar e implementar programas
preventivos en sus distintos niveles: primario, secundario y terciario,
contribuyendo así a una respuesta integral y eficaz frente a la criminalidad.
El criminólogo también brinda un
valioso apoyo al sistema de justicia. Por ejemplo, a partir de la investigación
de los hechos, puede recopilar información y pruebas que resulten útiles para
el proceso judicial, contribuyendo al enjuiciamiento de una persona. Además,
está capacitado para emitir criterios técnicos sobre la peligrosidad del
infractor, así como sobre sus necesidades de rehabilitación.
Referencias
Comentarios
Publicar un comentario